APORTACIONES

Pasos registrados: como escribir una coreografía

Se conocen varios métodos para escribir en papel los movimientos de la danza.

Desde la antigüedad los pasos de baile de una danza tradicionalmente se transmitían de generación en generación, lo cual en ocasiones provocó que muchas danzas se perdieran con el paso del tiempo al no estar registradas por escrito.

La escritura del movimiento no es fácil, se requiere de mucho estudio y dominio de la terminología de los pasos. Para ello existe actualmente la especialización en Coreología, carrera que trata sobre el análisis y la escritura del movimiento, principalmente se imparte en países como Francia o Inglaterra.


Por Patricia Cruz (El Salvador) - Se conocen varios métodos para escribir en papel los movimientos de la danza. El primero de ellos surgió del bailarín Pierre Beauchamps en el siglo XVII a quien se le adjudica la creación de las cinco posiciones básicas de la danza clásica. En 1661, Luis XIV crea la Real Academia de Baile en Francia, Beauchamps era el maestro, marcando así el inicio de la enseñanza académica del baile. Las técnicas de danza de dicho siglo fueron anotadas por Raoul Feuillet en su libro Chorégraphie del año 1700.

Entre los sistemas menos conocidos de escritura coreográfica se encuentran la notación Benesh y la notación Eskhol–Wachman. La primera fue creada por Rudolph Benesh basado en las anotaciones que su esposa, la bailarina del Royal Ballet de Londres Joan Rothwell, hacía para recordar los movimientos y hacer sus ejercicios. La segunda creada por la israelí Noa Eshkol quien ha desarrollado su propio método de escritura de los movimientos dancísticos el cual es impartido a los alumnos de la Academia Rubin de Música y Danza en Jerusalén, donde incluso se cuenta con un departamento dedicado a la notación del movimiento.


Metamorphose Choreographien von Ingun Bjornsgaard und Meryl Tankard, Komische Oper - Berlin Foto Jirka Jansch

La notación Laban, Labanotación o Cinetografía, ha resultado ser desde su aparecimiento a principios del siglo XX hasta la fecha, uno de los principales sistemas de escritura del movimiento. Su sistema se basa en lo que Rudolph llamó "Kinesfera" definido como el "Espacio máximo alcanzado por las extremidades del cuerpo humano de pie, sin levantar los pies del piso" (María del Pilar Naranjo Rico, Facultad de Artes, Universidad de Antioquia). Se considera como el espacio virtual que rodea al cuerpo, cruzado por un eje vertical que establece las direcciones posibles en que se desplazan las partes del cuerpo, cada una representada por un símbolo.

Para escribir una coreografía se utiliza un cinetograma o staff, en el cual se organizan las direcciones de las partes del cuerpo dentro de la kinesfera. El cinetograma está conformado por tres líneas paralelas que se leen de abajo hacia arriba de la página y su continuidad representa la dimensión temporal del movimiento, según explica Naranjo en su escrito "La Cinetografía Laban".

Como es de apreciar, la escritura del movimiento no es fácil, se requiere de mucho estudio y dominio de la terminología de los pasos. Para ello existe actualmente la especialización en Coreología, carrera que trata sobre el análisis y la escritura del movimiento, principalmente se imparte en países como Francia o Inglaterra. El trabajo de un coreólogo es apoyar al coreógrafo en el registro escrito de las obras coreográficas (Tanto los pasos como la música) a manera de una partitura, para conservarla en el tiempo.

El estudio de la notación de la danza es de mucha importancia, por lo que existe una institución llamada International Council of Kinetography Laban / Labanotation (ICKL), que reúne a especialistas en el campo de la transcripción de los movimientos. Entre julio y agosto de 2005 se reunieron en Londres en su 24ª conferencia para analizar las nuevas investigaciones de la kinetografía de Laban. Uno de los puntos medulares de la reunión fue la formación de profesionales de la notación. Actualmente se enseña coreología en países como Hungría, Francia, Alemania y Estados Unidos.

En la nación norteamericana existe el Dance Notation Bureau (DNB), fundado en 1940 por Ann Hutchinson Guest, Helen Priest Rogers, Eve Gentry y Janey Price, esta institución se encarga de formar profesionales en la notación de la danza utilizando Labanotación. DNB ofrece cursos por correspondencia de Labanotación en los niveles elemental y secundario a un costo de $495, pueden aplicar estudiantes y bailarines profesionales de todo el mundo, sólo deben cumplir los requisitos detallados en el sitio oficial, adquirir los textos necesarios, llenar el formulario y hacer el pago del curso.

Además existen en Internet artículos y manuales de danza, que pueden contribuir a enriquecer las técnicas de baile de coreógrafos nacionales. La falta de una institución superior de enseñanza de esta disciplina en El Salvador, mantiene en el rezago profesional a los bailarines, y les priva de una formación completa y certificada que les permita desempeñarse en todas las áreas.

El coordinador de la Dirección de Propiedad Intelectual, José Ángel Arriaza, explica que registrar una coreografía es sencillo, basta con presentar en el CNR la solicitud de registro siguiendo el modelo que hay en línea en el sitio Web de la entidad, y cancelar un recibo por valor de $11.43 en concepto de depósito de obra. Además se debe anexar el guión coreográfico que detalle cada movimiento que compone la coreografía; pero es ese el principal obstáculo que enfrentan los coreógrafos nacionales al intentar registrar sus trabajos, puesto que no hay un acuerdo en cuanto al método para transcribir los movimientos de danza.



Las ventajas que ofrecen los sistemas de notación de los movimientos de la danza, permitirán en un futuro a los miembros de las escuelas de danza, futuros coreógrafos profesionales, seguir practicando las danzas de sus maestros y darles una continuidad en el tiempo. Para registrar legalmente una coreografía en el Centro Nacional de Registros (CNR) el proceso es sencillo, sin embargo, miembros del gremio de la danza solicitan de más apoyo y orientación para el proceso de transcripción escrita de los movimientos.

Metamorphose Choreographien von Ingun Bjornsgaard 

und Meryl Tankard, Komische Oper, Berlin Foto Jirka Jansch

El método más conocido es la Notación Laban o Labanotación, creado por el coreógrafo, teórico, filósofo y pedagogo austriaco Rudolf Von Laban, el cual provee un vocabulario para describir los movimientos cualitativa y cuantitativamente. Los elementos principales de dicho método son: el cuerpo humano, el espacio y el esfuerzo energético. Además de ser aplicable a la danza, este método puede utilizarse en los deportes, el teatro o la danza terapia.

Sin embargo para Francisco Centeno, director de la Escuela Nacional de Danza (END), este método no resulta del todo viable "El método Laban tiene una técnica y una estructura...Creo que es imposible transcribir por ejemplo una coreografía de una hora...Yo no he manejado el método pero creo que tiene su gran importancia cuando se creó". Propone en su lugar hacer anotaciones "Con dibujos, esquemas, eso es lo que hacen los grandes coreógrafos". Agregó que en su caso utiliza el video como soporte para llevar un archivo de las coreografías que ha producido, además de guardar los programas de mano que acompañan una presentación.

Por su parte el coreógrafo y director de la Compañía Ballet Teatro, Mauricio Bonilla, comenta sobre la dificultad que implica escribir los movimientos con palabras "Para escribir los movimientos, los pasos y ponerles un nombre a cada uno es difícil, hay nombres de pasos de folclor o de bailes de salón que son manejables pero la danza contemporánea o neoclásica, aunque tiene sus propios pasos, a la hora de escribirlos a veces no existen nombres propios para esos pasos". Por esa razón asegura es necesario traer expertos al país a dictar conferencias o seminarios para dar un asesoramiento sobre la forma de transcripción de los movimientos de danza.

Otro de los problemas que enfrenta el Ballet Folclórico al carecer de registros legales es el de que otros grupos de baile representen las danzas autóctonas salvadoreñas incluso a nivel internacional. Mencionó un caso, sin dar mayores detalles, de un grupo que ha viajado a Belice para presentar las danzas folclóricas "Yo pienso que aquí si hay un problema, porque cuando alguien se presenta como Ballet Folclórico de El Salvador eso si es un riesgo porque el Ballet Folclórico Nacional es una institución oficial, es una cosa muy diferente a representar coreografías", concluyó.

El director del Ballet Folclórico Nacional coincide con Bonilla al solicitar apoyo en este sentido "Nosotros lamentablemente no hemos tenido la posibilidad de sacar nuestros cursos de coreografía, nos toca a puro ingenio hacer nuestras cosas, ver cómo escribimos, tenemos algunas coreografías escritas para los ensayos...Hay buena memoria...Yo tengo el cuidado de que no se duerma ninguna coreografía". Afirmó que hasta el momento no han necesitado de video o escritos para ensayar cada una de las coreografías que poseen, puesto que al ensayar a diario mantienen frescos los pasos de las danzas.

Los retos

El deseo de los coreógrafos nacionales por obtener ayuda en cuanto a la forma apropiada para escribir las coreografías, no ha sido expresado directamente en el CNR. El coordinador de la propiedad intelectual, José Arriaza, afirmó a CLIC vía telefónica que de tener un contacto más directo con un representante del sector coreográfico, facilitaría el cumplir con la demanda de los coreógrafos.



Metamorphose Choreographien von Ingun Bjornsgaard 

und Meryl Tankard, Komische Oper, Berlin Foto Jirka Jansch

Además de ello se requiere mejorar las oportunidades de estudio y acreditación del sector de la danza en el Salvador. El intercambio de experiencias con coreógrafos extranjeros, brindaría al gremio la oportunidad de despejar todas sus dudas en cuanto a la forma de transcribir los pasos de danza. En este sentido instituciones como el CNR podrían colaborar trayendo al país colegas de instituciones de registro de naciones donde la legalización de coreografías sea más común. Los centros culturales de las delegaciones internacionales también pueden jugar un papel importante en este sentido.

Pero quizás la meta más importante a lograr es la unión de los coreógrafos y bailarines salvadoreños, pues como lo mencionó Bonilla existe una fuerte lucha entre todos "Somos un poco desorganizados los bailarines o desunidos, a lo mejor si hubiera un poquito más de comunicación, de convivio y de conocimientos fuertes dancísticos en el país, fuera diferente", expresó. Con la consolidación del gremio se podría enviar solicitudes a coreógrafos extranjeros de instituciones académicas a manera de colaboración para que dicten charlas a los bailarines y continuar así su proceso de profesionalización en el área coreográfica. Fuente: www.clic.org.sv - El Salvador


Documentos consultados:

•Conferencia de International Council of Kinetography Laban / Labanotation (ICKL)

•"La Cinetografía Laban". Artículo de Pilar Naranjo

•Manual de Danza y Expresión Corporal. Para maestros de Educación Artística de Educación Primaria. Universidad Abierta, México.

•Exploración sobre las construcción y la reconstrucción coreográficas. Alberto Dallal, Instituto de Investigaciones Estéticas de la Universidad Autónoma de México.

•Diccionario de Movimientos de Danza 

•Pasos de Ballet y Manual para Bailarines - Portal Danza Ballet 

•Conferencia de International Council of Kinetography Laban / Labanotation (ICKL)

•"La Cinetografía Laban". Artículo de Pilar Naranjo

Por Patricia Cruz

Fuente: www.clic.org.sv - El Salvador

Foto Jirka Jansch seleccionada por Danza Ballet

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